lunes, 11 de octubre de 2021

Avances de la investigación sobre la imagen de la mujer en el cine criminal español 2: Carencia de mujeres asesinas en el thriller español. El caso de Ryu (Mapa de los sonidos de Tokyo, Isabel Coixet, 2009). Laura Pacheco-Jiménez

 

Panorama

La palabra thriller es un término ampliamente utilizado en el contexto cinematográfico que rara vez aparece delimitado. Con líneas fronterizas difusas y un sinfín de géneros adscritos, se emplea de forma abierta, a veces imprecisa, incluso en la literatura científica que lo estudia. En palabras de Rubin, la palabra “es más que problemática y a todo aquel lo bastante osado como para intentar definirla podría parecerle vaga y general” (2000, p. 11).

El origen de esta voz inglesa se localiza en el término “taladrar”, por lo que ya desde el inicio transmite sufrimiento y emociones de carácter visceral. Para el ya citado autor, Martin Rubin, es un metagénero que engloba a otros géneros cercanos (2000), para López Sangüesa (2019) es un metagénero o intergénero procedente del cine de gánsteres y formado sobre los cimientos del de detectives o el noir; y para Charles Derry (2001), es un género abierto cuyo protagonista es un criminal no profesional obligado por las circunstancias.

Cuando se analiza de manera concreta dónde se encuentra exactamente la génesis del thriller, Rubin afirma que procede de la novela gótica, caracterizada por la premisa de que un hombre persigue y subyuga a una mujer (2000). Es decir, los orígenes del thriller o cine criminal proceden de literatura centrada en la dominación de lo femenino por parte de lo masculino.

Debido a lo abierto del género y a la confusión terminológica, se realiza aquí un estudio sobre el thriller en el que se recogen todas aquellas películas españolas registradas en la base de datos del ICAA (Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales) cuya etiqueta genérica sea “thriller”, “suspense”, “policíaca”, “acción” o “negro”, producida entre los años 2000 y 2017. A estas cintas (61 en total) se les realiza un estudio para observar el sexo de los criminales representados y se obtiene que solo el 23,03% son mujeres (frente a un 76,97% hombres). Cabe destacar aquí que se han excluido del perfil criminal a las mujeres que ejercen la prostitución pues, si bien están al margen de la ley, lo que interesa es conocer cuántas son asesinas, ladronas o cometen delitos de otro tipo.

                               Gráfico 1. Relación de criminales por sexo.

                              Fuente: elaboración propia.

A partir del año 2000 hay un cierto repunte de mujeres criminales, dejando de lado a las prostitutas, aunque estas siguen siendo mayoría. A partir del nuevo milenio, hay una mayor representación de ladronas (Incautos, Miguel Bardem, 2004 o The Pelayos Eduard Cortés, 2012), mujeres que están relacionadas con carreras ilegales de coches (Combustión, Daniel Calparsoro, 2012), criminales desequilibradas (Utopía, María Ripoll, 2003) o mujeres que cometen ilegalidades empujadas y doblegadas por los personajes masculinos (La caja 507, Enrique Urbizu, 2002). Entre el año 2012 y el 2014 hay una mayor proliferación de estas criminales y surgen los personajes femeninos maquiavélicos, inteligentes y calculadores como son los casos de Delia en Séptimo (Patxi Amezcua, 2013) o Virginia Goodman en Contratiempo (Oriol Paulo, 2016). Sin embargo, pasados esos tres años, las mujeres criminales vuelven a cotas de decenios anteriores.

Como puede observarse, hay un perfil criminal que ha sido mencionado, pero no ejemplificado: las mujeres asesinas y es que, el cine español, adolece de una grave representación de estos personajes. En la muestra de 61 cintas solo se encuentra un caso de un personaje femenino cuya profesión es asesina a sueldo, y es Ryu en Mapa de los sonidos de Tokyo (Isabel Coixet, 2009). Por supuesto, se encuentran féminas que acaban cometiendo asesinatos o ejercen algún tipo de violencia física sobre otros personajes, pero normalmente se produce de forma accidental o provocada por las circunstancias que rodean al personaje. Ryu es el único caso en el que el personaje femenino -que, además, es protagonista- ejerce la criminalidad como profesión sin mostrar estrés, arrepentimiento o estar abocada a ello.

La película

Ryu es una asesina a sueldo a la que le encargan el asesinato de David, un dependiente de una tienda de vinos cuya novia se suicidó y el padre de ella le culpa de lo acontecido. Conforme Ryu investiga a David, se va acercando a él hasta que empiezan una relación sexual esporádica y ella decide rechazar el trabajo de asesinarlo.

La profundidad con la que la directora Isabel Coixet trata a sus personajes, especialmente a los femeninos, permite al espectador descubrir en Ryu a una mujer compleja, con contradicciones, presentada como un personaje frío e incapaz de tener sentimientos y cuyo arco narrativo radica en el despertar emocional a través del sexo. Que una asesina a sueldo albergue sentimientos por su encargo supone una inversión de roles que es, sin duda, una rara avis, no ya para el cine español, que también, sino en el cine a nivel mundial.

Conclusiones: criminales, que no asesinas

En definitiva, la proliferación de mujeres criminales que se inicia en el año 2000 encuentra su punto álgido entre los años 2012 y 2014, sin embargo, no se sostiene en el tiempo. A esto hay que sumar el hecho de que, en el cine español, las criminales nunca han tendido hacia el asesinato, sino que son casos aislados o mujeres cuyo contexto las lleva a matar, pero no se definen como asesinas per se, más que el exclusivo caso de Ryu en Mapa de los sonidos de Tokyo.

Si ya las mujeres criminales en los últimos años suponen poco más del 20% con respecto a los varones, solo se encuentra un personaje femenino como asesina sin más, por lo que queda demostrado que las mujeres asesinas en el thriller español no son un personaje representado y, por tanto, brillan por su ausencia.

Referencias bibliográficas

Derry, C. (2001). The suspense thriller: Films in the Shadow of Alfred Hitchcock. McFarland. (Original publicado en 1988). 

López Sangüesa, J. L. (2019). El thriller español (1969-1983). Editorial Laertes.

Rubin, M. (2000). Thrillers. (Manuel Talens, trad.). The Press Syndicate of the University of Cambridge; Cambridge University Press. (Original publicado en 1999).

Referencias filmográficas

Amezcua, P. (2013). Séptimo [Película]. Telecinco Cinema; Ikiru Films; El Toro Pictures; Cepa Audiovisual; Capital Intelectual.

Bardem, M. (2004). Incautos [Película]. Alquimia Cinema; Telemadrid; Televisión Autonómica Valencia; Mandarin.

Calparsoro, D. (2013). Combustión [Película]. Zeta Cinema; Atresmedia Cine.

Coixet, I. (2009). Map of the Sounds of Tokyo [Mapa de los sonidos de Tokio] [Película]. Mediaproduccion; Versátil Cinema.

Cortés, E. (2012). The Pelayos [Película]. The Kraken Films; Afrodita Audiovisual; Bausan Films; Alea Docs & Films; Los Pelayos, la película.

Paulo, O. (2016). Contratiempo [Película]. La Habitación Cerrada; Atresmedia Cine; Colose Producciones; Think Studio.

Ripoll, M. (2003). Utopía [Película]. Alquimia Cinema; Fidelité Productions.

Urbizu, E. (2002). La caja 507 [Película]. Sociedad General de Cine.

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