miércoles, 23 de junio de 2021

Avances de investigación sobre: "La transgresión del cine trans canónico a través de la corporalidad y la orientación afectiva. Un estudio de caso sobre la representación cinematográfica de los personajes trans en las secciones queer de los festivales internacionales de cine europeo (2010-2021)" por Sofía Otero-Escudero

GLOSARIO DE TERMINOLOGÍA: 

La terminología y el lenguaje evolucionan al mismo tiempo que lo hace la situación social que lo circunscribe y construye. En el presente texto se desglosa una lista de términos que son utilizadas a lo largo de la tesis doctoral La transgresión del cine trans canónico a través de la corporalidad y la orientación afectiva. Un estudio de caso sobre la representación cinematográfica de los personajes trans en las secciones queer de los Festivales Internacionales de Cine Europeo (2010-2021). Debida a la continua actualización de la terminología, el glosario que se va a presentar a continuación no está conformado por definiciones estancas y definitivas, sino que está abierto a su actualización y modificación conforme las circunstancias así lo requieran. Finalmente, es relevante reseñar que en este texto se destacarán los términos necesarios para comprender la tesis mencionada, por lo que no se recoge toda la terminología existente respecto al colectivo trans o en general el colectivo LGBTIQ+. 

Aunque a lo largo de todo el trabajo de investigación se desarrollan los términos utilizados para así poder comprender la tesis al completo, la presente lista se ofrece con el objetivo de facilitar tanto la lectura como la comprensión de esta, ofreciendo un enlace rápido a las palabras referidas en el trabajo (recomendación bibliográfica para terminología: Platero, R.L., Rosón, M. y Ortega, E. (2017), Barbarismos queer y otras esdrújulas):

  • Agencia: deviene de la palabra inglesa agency, que hace referencia a “hacer, actuar y mediar con autodeterminación como sujeto activo en el gobierno de la vida” (Villaplana, 2017, p.19). En los ámbitos y colectivos LGBTIQ+ este término define la capacidad de desarrollar y llevar a cabo una subjetividad diferente a la normativa como un proceso cultural y colectivo reconocido. Es una estrategia de resistencia a través de la cuál se reclama una subjetividad que subvierte las únicas subjetividades válidas establecidas por el sistema (Villaplana, 2017). Una de las formas de resistencia a través del agenciamiento definido por Virginia Villaplana (2017), son aquellas relacionadas con la acumulación de valor afectivo señalado por teóricas como Sara Ahmed, es decir, desarrollar una forma de actuación como sujeto activo generando una orientación afectiva basada en el amor y la felicidad frente a la tradición de violencia, transfobia y odio hacia el sujeto que se constituye por la sociedad como abyecto. “Del mismo modo el giro afectivo, la agencia narrativa, la experiencia como embodied knowledge son cuestiones centrales en el debate sobre la construcción de la memoria queer. Este debate se centra en la emergencia de narrativas queer feminista, postcoloniales y los procesos de representación” (Villaplana, 2017, p.25). 
  • Binarismo: consiste en la jerarquía dualista establecida en la sociedad donde solo existen y son reconocidos dos género posibles y excluyentes, mujer y hombre, fundamentado en una base esencialista y biológica donde solo existen dos sexos (Mateos, 2017; Torras, 2007). Este binarismo no hace solo referencia al género sino también a las sexualidades o etnias entre otras categorías, dividiendo la sociedad en categorías duales y estancas donde solo hay dos polos extremos posibles junto a los atributos que se les asignan como propios. Además, uno de estos dos polos siempre funciona como hegemónico por encima del otro que se considera una amenaza: hombre/mujer, heterosexualidad/homosexualidad, cisgénero/transgénero… (Torras, 2007). “En occidente, todas las «excepciones» son debidamente re-catalogadas dentro del binario hombre y mujer, dando la sensación de estabilidad y permanencia de tal división, si bien las personas siempre exceden esas categorías” (Platero, 2014, p.28).
  • Cis/género: el término cis se utiliza como prefijo, el cual se añade al sustantivo género para “designar a personas cuya identidad de género asumida coincide con aquella que se les ha asignado al nacer, en función de criterios normativos de correspondencia entre características del denominado sexo biológico y la identidad de género”(Martínez-Guzmán, 2007, p.82). En la presente investigación el término se utiliza desde un aspecto no binario, tal y como hace la teórica Susan Stryker, utilizado cis como un prefijo que indica una forma de estar en línea en algunos aspectos con el lugar privilegiado de la división de géneros, frente al término trans como una palabra que atraviesa los límites del género asignado al nacer y sus consecuencias sociales (Stryker, 2017). Con el uso de este término junto al término trans, se reclama la visibilidad de esta identidad de género normalizada, para así no situar a la persona trans como abyectas ante las demás personas que no se identifican con ese término, sino poniéndole nombre a cualquier identidad posible y existente, “se vuelve una herramienta lingüística para abrir una vía de cuestionamiento hacia las identidades y experiencias no-transgénero como normas universales y experiencias naturales, para en su lugar concebirles como una de las diversas posibilidades de la identificación genérica” (Martínez-Guzmán, 2017, p.85).
  • Corporización/corporalización: esta palabra se utiliza como equivalente de la palabra inglesa embodiment, dada la inexistencia de una traducción real que recoja todas las connotaciones del término. Con este nuevo término se hace referencia a la capacidad de expresar con el cuerpo, de poseer agencia a través del cuerpo, “por lo que siendo éste poseedor de agencia en mayor o menor medida, la materialización corporal es significante, produce significado a la vez que es producida por él" (Torras, 2017, p.161). Con el uso de este término además, se busca eliminar la división cartesiana de cuerpo/alma, reivindicando la materialidad del cuerpo alejada de la concepción de lo material como inferior a lo racional, así como de lo natural frente a lo construido. “Mientras la corporeality [corporalidad-corporealidad] comprende las acciones y reacciones del cuerpo carentes de intención y/o agencia, el embodiment [corporeización] persigue, por el contrario, la consecución de esa agentividad, con lo que el concepto se carga políticamente” (Torras, 2017, p.164). 
  • Corporalidad/corporalidades: En el presente trabajo se utilizará en su mayoría la palabra corporeidad y corporeización para reivindicar el carácter más activo y político del cuerpo, no obstante, tanto en el título como en otras ocasiones a lo largo del texto se utilizará la palabra corporalidad/corporalidades como sinónimo que hace hincapié en el carácter social del cuerpo, dado que al ser un trabajo académico se considera necesario utilizar terminología registrada por la DRAE, más allá del carácter reivindicativo del uso de nuevos términos adaptados. Se utiliza el término además en la misma línea que lo hace el teórico Jack Halberstam: “El concepto de ser alguien sin género, sin embargo, es algo caprichoso en el mejor de los casos, ya que hay pocas maneras de interactuar con otros seres humanos sin identificarse con algún tipo de corporalidad marcada por un género” (Halberstam, 2018, p.27). Finalmente, a lo largo de la investigación, también se hace referencia a la palabra cuerpo como sinónimo, dado que no se considera la existencia de un cuerpo esencialista y biológico desprendido de su carácter social y construido, tal y como reseña Butler (2006,2011) respecto al binomio sexo/género y los cuerpos que importan. 
  • LGBTIQ+: En un principio y gracias a los movimientos de liberación gay y lésbico de los años 70 se acuñó el acrónimo LGB haciendo referencia al colectivo de distinta orientación sexual a la heterosexual: lesbianas, gays y bisexuales. No obstante, con el paso del tiempo dicho colectivo se ha visto ampliado y diversificado, en un principio también con la identidad trans añadiendo la letra T: LGBT. No obstante, en la actualidad dicho colectivo acoge a un gran número de personas con sus respectivas identidades y sexualidades, y es por ello que se ha ampliado a LGBTIQ+, añadiendo la Q en referencia a las personas queer y el uso del + para así no excluir a nadie que pertenezca al movimiento (Redacción EC, 2020; Vila, 2019). La letra I hace referencia a las intersexualidades, término que es invisibilizado con el uso del acrónimo LGBT. Este término hace referencia a “personas que nacen con características sexuales (incluyendo genitales, anatomía reproductiva, gónadas y/o cromosomas) que no encajan en la noción típica binaria de cuerpos masculinos y femeninos” (García y Gregori, 2017, p.272). Su vibilización se hace aun más necesaria teniendo en cuenta que es una forma de superar el binarismo normativo impuesto en la sociedad que oprime a estas personas. Por este motivo, en el presente trabajo, aunque se utilice el acrónimo LGBT por economía del lenguaje, se utilizará de igual modo como sinónimo el acrónimo completo LGBTIQ+. 
  • Heteronormatividad: en palabras de Miguel Ángel López, “es el régimen político, social, filosófico y económico generador de violencias hacia todas aquellas personas que no seguimos un patrón de género, de sexualidad, de prácticas y deseos asociados a la heterosexualidad” (López, 2017, p.228). Este cuestionamiento del sistema normativo surge gracias a movimientos como el pensamiento queer, el feminismo postcolonial o el transfeminismo. Autoras como Monique Wittig o Adrienne Rich señalan la heterosexualidad obligatoria como mecanismo de poder, así como el pensamiento queer con académicas como Teresa De Lauretis o Judith Butler, buscan crear espacios de resistencia ante esa heterosexualidad impuesta desde diferentes ámbitos. Otras teóricas como Sara Ahmed o Eve Kosofsky Sedgwick buscan desde el giro afectivo superar el racionalismo heteronormativo que genera una situación social en la que algunos cuerpos encajan frente a otros que se salen de la norma (Ahmed, 2017; Butler, 2006; Córdoba, et al., 2005; López, 2017; Sánchez, 2012).
  • Interseccionalidad: término acuñado popularmente por Kimberlé Crenshaw (1991), enraizado en el pensamiento feminista negro y chicano. En su trabajo, la teórica aborda la violencia contra las mujeres negras desde una perspectiva de interseccionalidad de categorías, en lugar de basarlo en la política de identidades. Al igual que hizo la Teoría Queer respecto a la exclusión de identidades del movimiento gay y lésbico, en el caso del movimiento feminista y en un ejercicio de autocrítica, Kimberlé Crenshaw afirmó que la etnia, el género y otras categorías identitarias estaban entrecruzadas bajo el mismo sistema opresivo, basado en una jerarquía de poderes que decide quién vive y quién no. Idea que la teórica feminista Gloria Anzaldúa (2016) abordó denominando a las identidades y otras categorías sociales crossroads.  También desde el activismo, el Combahee River Collective y su manifiesto en 1974, se establecen como uno de los eventos fundacionales para el feminismo interseccional y las políticas de feminismo inclusivo (Butler, 2011; Crenshaw, 1991; hooks, 1984; Stryker, 2017).
  • Postcolonial: este término hace referencia de forma literal a la situación geopolítica global que se sitúa en la etapa posterior a la dominación colonial impregnada de racismo. No obstante, esto no significa que el racismo haya desaparecido, sino que aquellos lugares que eran dominados por los sistemas imperiales, pasan a ser independientes. En el ámbito académico se han desarrollado diferentes términos para hacer referencia a la superación y toma de conciencia de esta situación como anti-colonial o de-colonial. Con el término postcolonial, se hace referencia tanto en el activismo como en la academia a esa reelaboración de la historia que se ha desarrollado desde una perspectiva hegemónica y colonialista, haciendo visible y dando voz a aquellas personas y pensamientos que eran ocultados y oprimidos (Godoy, 2017). “La toma de posición frente a las formas en que aún opera el inconsciente colonial es el camino de sanación, como diría Suely Rolnik, de unas heridas que perviven en los modos contemporáneos del racismo institucional y cotidiano, que afecta a las configuraciones micro y macropolíticas de las vidas” (Godoy, 2017, p.362). 
  • TERF (Trans-Exclusionary Radical Feminism): En español se traduce como Feminismo Radical Trans Excluyente. Este término hace referencia a la escisión del pensamiento feminista que discrimina a las mujeres trans y las excluye del movimiento. Una de las teóricas más destacadas en los orígenes fue Janice Raymond y su libro The Transsexual Empire (1979) (Osborne, 2017; Stryker, 2017).
  • Trans/trans*: más allá de la palabra transgénero, que puede ser considerada lo contrario a transexual en referencia a la cirugía genital, se utilizan trans y trans* ambos como términos más amplios que abarcan a cualquier persona que transgreda el sistema normativo y binario de género, eliminando así la connotación biológica (Stryker, 2017). Con el uso del asterisco se aumenta el rango de alcance del término trans, en relación con la lógica informática que utiliza el asterisco como herramienta para buscar todo lo relacionado con la palabra que acompaña, en este caso el prefijo trans, convirtiéndolo así en una palabra más diversa y susceptible de cualquier sustantivo que lo acompañe (Platero, 2017). “El dinamismo y cambio que reflejan, especialmente con su sentido perenne de caducidad y la rápida crítica que suscitan, se asocia a la necesidad de nombrar y reconocerse en un lenguaje que no siempre recoge los matices que se experimentan en cada momento cultural y político, evidenciando los matices locales, pero también personales de conformación de la identidad” (Platero, 2017, p.409). En el presente trabajo se utilizan como sinónimos tanto la palabra trans sin asterisco como con asterisco, para facilitar así la lectura. 
  • Tránsito: A lo largo de todo el texto se utilizará la palabra tránsito para evitar la connotación que conlleva el término transición sobre un proceso que tiene una meta final que consiste en ser de otra forma. Según el Diccionario de la RAE la palabra transición se define como: “Acción y efecto de un modo de ser a otro distinto” (Real Academia Española, 2014, definición 1). Aunque es más común el uso del término tránsito en el ámbito activista, algunos autores de los estudios trans como R.L. Platero o Meri Torras utilizan esta palabra para hacer referencia a ese momento en el que la persona busca el reconocimiento social de su identidad de género. “Para algunas personas no se trata tanto de transitar de un género a otro, como el hecho de no encajar con las normas y preceptos que constriñen a cada género. Puede que su devenir no reproduzca la idea de «ir de una identidad a otra», sino que sus vidas cuestionen tanto el punto de partida […] como la idea de que exista una identidad a la que llegar" (Platero, 2014, p.46). Torras (2017) además lo relaciona con la corporalidad como reconocimiento y construcción social y añade que “la corporeización es una negociación política que implica el cuerpo en el proceso de subjetivización, un tránsito que tiene lugar por las narrativas identitarias, por las prácticas corporales distintivas, por los discursos de poder constitutivos de lo que debe y puede ser un cuerpo” (Torras, 2017, p.164). También Masson hace referencia a la misma idea al abordar la “gordofobia”: “lo que se vende es la ilusión del cuerpo al que siendo obediente, se podrá acceder, lo que además convierte a las personas gordas en un cuerpo en tránsito que va en busca del cuerpo ideal” (Masson, 2017, p.209). En el presente trabajo se utiliza como una forma de moverse a través de los límites sociales impuestos respecto al género, alejándose del uso quirúrgico y psiquiátrico que hace referencia a la llegada a un objetivo final relacionado con un cambio físico para encajar en los patrones y lógicas normativas binarias (Carter, 2014).

Referencias:

Ahmed, S. (2017). La política cultural de las emociones. Centro de Investigaciones y Estudios de Género. 

Carter, J. (2014). Transition. TSQ: Transgender Studies Quarterly1(1–2), 235–237.https://doi.org/10.1215/23289252-2400145

Butler, J. (2006). Deshacer el género. Paidós.

Butler, J. (2011). Bodies That Matter. On the Discursive Limits of SexRoutledge.

Córdoba, D., Sáez, J. y Vidarte, P. (2005). Teoría queer. Políticas bolleras, maricas, trans, mestizas. Egales. 

Crenshaw, K. (1991). Mapping the Margins: Intersectionality, Identity Politics, and Violence against Women of Color. Stanford Law Review43(6), 1241-1299. https://doi.org/10.2307/1229039

García y Gregori (2017). Intersexualidades. En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.272-280). Bellaterra.

Godoy, F. (2017). Postcolonial. En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.356-363). Bellaterra.

Halberstam, J. (2018). Trans*—Una guía rápida y peculiar de la variabilidad de géneroEgales. 

hooks, bell. (1984). Feminist Theory: From Margin to Center. South End Press Classics.

López, M.A. (2017). Heternormatividad. En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.228-238). Bellaterra. 

Martínez-Guzmán, A. (2017) Cis. En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.82-88). Bellaterra. 

Masson, L. (2017). Gordofobia. En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.208-214). Bellaterra.

Mateos, C. (2017). Binarismo. En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.46-55). Bellaterra. 

Osborne, R. (2017). TERF, Feminismo Radical Trans Excluyente. En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.403-408). Bellaterra.

Platero, R.L. (2014). Trans*exualidades. Acompañamiento, factores de salud y recursos educativos. Bellaterra. 

Platero, R.L. (2017). Trans* (con asterisco). En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.409-415). Bellaterra.

Real Academia Española. (2014). Diccionario de la lengua española (23a ed.).

Redacción EC. (3 de julio de 2020). “¿Sabes qué significan las siglas LGBTIQ+? Aquí te lo explicamos”. El Comercio. https://elcomercio.pe/respuestas/sabes-que-significan-las-siglas-lgbtiq-mes-del-orgullo-lgbtiq-lgbt-disturbios-de-stonewall-bandera-lesbianas-bisexuales-revtli-noticia/

Sánchez, I.M. (2012). Presentación. En M.Moraña, M. y I.M.Sánchez Prado (Eds.), El lenguaje de las emociones. Afecto y cultura en América Latina (pp.11-16). Vervuert Verlagsgesellschaft. 

Stryker, S. (2017). Historia de lo trans – Las raíces de la revolución de hoy. Continta Me Tienes. 

Torras, M. (2017) Embodiment (embodimén). En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.161-167). Bellaterra. 

Vila, L. (27 de junio de 2019). “¿Qué significan las siglas LGBTIQ+?”. La Vanguardia. https://www.lavanguardia.com/vida/junior-report/20190627/463124839887/lgbtiq-definiciones.html

Villaplana, V. (2017) Agencia. En R.L.Platero, M.Rosón y E.Ortega (Eds.), Barbarismos queer y otras esdrújulas (pp.19-28). Bellaterra. 

 

miércoles, 16 de junio de 2021

María Toscano, miembro de AdMira, defiende su tesis doctoral sobre representaciones trans en el cine español

La investigadora de AdMira, María Toscano Alonso, defendió el pasado 14 de junio su tesis doctoral en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla, obteniendo la máxima calificación de Cum Laude por Unanimidad, así como la Mención Internacional. La tesis, titulada Polimorfismo de género en el cine español: Representaciones transidentitarias y travestis en el siglo XXI, ha sido dirigida por la profesora del Departamento de Comunicación Audiovisual y Publicidad y directora del grupo AdMira, Virginia Guarinos Galán, y se inscribe en el Programa de Doctorado Interuniversitario en Comunicación.
El trabajo versa sobre las representaciones transidentitarias y travestis en el cine español producido entre 1999 y 2019. En un contexto como el actual en el que las identidades trans, la teoría queer y todos los términos y discusiones surgidos en torno a ellas están adquiriendo una presencia notable en los medios de comunicación y en los debates políticos y sociales, esta tesis doctoral toma como referencia los estudios sobre Queer Cinema y representaciones LGBT+ a nivel nacional e internacional para ahondar en la imagen de este colectivo en el cine español del siglo XXI. Asimismo, la autora alude a las transformaciones conceptuales y terminológicas producidas en las últimas décadas en este ámbito, además de a los cambios socio-políticos y a las diferentes perspectivas desde las cuales se aborda este asunto, utilizando como metodología la Teoría Narrativa, el Análisis de Contenido y la Teoría Fílmica Feminista.
El tribunal encargado de evaluar el trabajo ha estado compuesto por los siguientes miembros: Presidenta: Iolanda Tortajada Giménez (Universidad de Rovira i Virgili) / Vocal: Francisco Zurian Hernández (Universidad Complutense de Madrid) / Vocal: Alfredo Martínez Expósito (Universidad de Melbourne, Australia) / Vocal: Alejandro Jiménez Arrazquito (Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, México) / Secretario: Sergio Cobo Durán (Universidad de Sevilla)

Investigadores de AdMira analizan para 'ABC' los concursos televisivos de conocimientos

El pasado 14 de junio, el diario ABC publicó el primero de una serie de tres reportajes dedicados al género televisivo de los concursos de conocimientos, que ha contado con la participación de los investigadores de AdMira Inmaculada Gordillo y Sergio Toledo. Bajo el título 'La estrategia televisiva que hace que te enganches a Pablo Díaz en Pasapalabra y que aún recuerdes a Los lobos', Gordillo y Toledo analizan en profundidad las estrategias que desarrollan los quiz show para ganarse y mantener a la audiencia, y la importancia de la identificación del público con el "héroe" para un formato que constituye uno de los grandes pilares de la programación española.
En el reportaje, firmado por Inma Zamora, los compañeros de AdMira Inmaculada Gordillo y Sergio Toledo llevan a cabo una revisión de los principales hitos en la historia de este tipo de concursos en el contexto español, desde el lejano X-0 da dinero (1959) hasta los actuales y exitosos Pasapalabra o Boom, pasando por el mítico Un, dos, tres... responda otra vez de los setenta, o por 50x15, estrenado en 1999 y considerado la "joya de la corona" de los quiz show españoles. Además, junto al guionista Luis Murillo, ahondan en los aspectos históricos y estratégicos que han convertido a este tipo de programas en uno de los formatos más longevos de nuestra televisión y, sin duda, también en uno de los que más futuro tiene a juzgar por los datos. El reportaje completo puede leerse aquí.